Lloré su final como nunca pensé que lloraría por la muerte de un personaje.Pues si os soy sincera desde que leí este hermoso libro me di cuenta que no me hacían falta ni imágenes plasmadas en una pantalla ni música que ambientara los sucesos, pues solo con una lámpara, un libro y una buena imaginación puedes conseguir ver una historia sin que nadie la diseñe a su manera.
Por otro lado añadir que la historia me ha fascinado, ya que gracias a esta visión desde este personaje me he podido dar cuenta como la vida es un segundo, pues con solo un soplo de aire podemos acabar bajo tierra.Pues William Traynor pasó de tenerlo todo a no tener...Ya os enteraréis, yo solo quiero dar las gracias a Jojo Moyes por plasmar en papel la vida desde los ojos de una persona con dificultades, donde un escalón es un muro, donde una piscina es un océano,donde el simple hecho de coger un libro de una estantería es una escalada de montaña.
Os lo recomiendo, disfrutad de cada página.
